Conjunto de mazos de Riotorto

 
Otro patrimonio histórico

Los mazos y herrerías tuvieron de siempre mucha importancia en el ayuntamiento de Riotorto. Fue gracias a la energía hidráulica que el proceso de trabajo del hierro se desarrolló ampliamente en la comarca. La primera referencia histórica a la artesanía del hierro en Riotorto es del siglo XVI y procede de la documentación del convento de Vilanova de Lourenzá.

El oficio tradicional de los herreros de Riotorto parece provenir de Euskadi, lo que confirmarían términos técnicos procedentes del euskera (aroza, aldabarra, arragua ou bandarria) y la presencia de apellidos vascos (Chavarría, Legaspi, Lombardero o Recalde) en el ayuntamiento.

El destacado etnógrafo Xaquín Lorenzo (Xocas), estudió el mazo de Chavarría (o de Ferreiravella) y gracias a su trabajo podemos saber cómo era el ingenio tradicional, ahora totalmente desaparecido.

Tradicionalmente forjaron hoces, grandes y pequeñas, y cuchillos que se enviaban a Castilla para la siega.

Aún se mantiene el conjunto de la Fraga o de Mazo Novo que en 1960 todavía era utilizado por 14 herreros, que trabajaban a turnos.

Se conservan en Riotorto dos de estos mazos: uno en ruinas, el Mazo de Bastián y otro restaurado, el Mazo da Fraga de Ferreiravella, que es posible visitar con reserva previa. (Consultar en el teléfono 982 346 222) 

Hoy en día la mayoría de los mazos en activo en Riotorto son eléctricos pero siguen desempeñando la misma función que los hidráulicos.